Por cuestiones del destino y la geografía el folclor llanero se ha conservado casi intacto para el disfrute de la humanidad donde se mezclan las costumbres andaluzas españolas con las influencias indígenas de la región y de la religión católica con sus misioneros que se han adentrado en estas llanuras hermosas y un poco inhóspitas de Colombia y Venezuela haciendo posible las dazas coloridas del joropo y los cantos a las mujeres , al paisaje y al amor con una alegría y libertad que solo se logra al respirar la vitalid del llano y la selva cuando inevitablemente el alma reconoce al creador.